Little, de 80 años, quien reconoció haber cometido 93 asesinatos entre 1970 y 2005, se encuentra cumpliendo dos cadenas perpetuas en una prisión de Texas. Desde mayo de 2018, ha venido revelando sus secretos en una serie de entrevistas con los investigadores.
Inicialmente, el convicto de EE.UU. se rehusaba a hablar sobre sus crímenes, pero conforme pasaban los días, las cosas cambiaron.
Sus declaraciones, que duraron más de 700 horas, revelaron a los agentes que a Little le gustaba dibujar, por lo que le proporcionaron materiales y le pidieron que retratara a sus víctimas. Después de 48 días de interrogatorio, el hombre confesó un total de 65 asesinatos. Fue cuando el agente James Holland le invitó a pizza y bebida gaseosa cuando sus historias empezaron a fluir.
El perfil de las víctimas de Samuel Little
Little confesó que la mayoría de sus asesinatos los cometió en Miami y Los Ángeles. Asimismo, indicó que sus víctimas frecuentemente eran prostitutas, drogadictos y mujeres a las que, según él, la Policía no se esforzaría en buscar.
El agente Holland describió al convicto como una persona inteligente y con una gran memoria que recordaba todos los detalles de sus víctimas y de los crímenes.
Samuel Little fue detenido en 2012 por unos cargos relacionados con drogas, y mientras estaba en custodia se encontraron pruebas de ADN que lo vinculaban con tres asesinatos sin resolver, por los que dos años más tarde fue sentenciado a cadena perpetua. Las investigaciones posteriores arrojaron más vínculos con otros numerosos crímenes. RT